Hoy vamos a hablar del lápiz o delineador de labios y cuándo debemos usarlo. Esta entrada es original de Clio Make Up, un sitio (y canal de YouTube) que sigo hace varios años y está en italiano, por eso, para que también ustedes, que hablan español, puedan tener esa información yo se los traduzco 🙂
¿Cuándo usar el delineador de labios?
Clio cuenta seis situaciones en que se hace fundamental usar un delineador de labios, pero ojo, no solo para delinear, también para rellenar los labios. Pero menos bla-bla y más acción, veamos esas situaciones…
El labial es demasiado cremoso
No es realmente un problema que el labial sea muy cremoso, el problema es cuando se desliza por las pequeñas arruguitas alrededor del labio. También puede suceder esto si aplicamos demasiada cantidad, por lo que si un labial no es muy pigmentado y le damos varias capas podría irse por los pliegues.
Para evitar esto no es necesario decirle adiós a ese labial que te encanta, un delineador de labios, transparente o con color, será un increíble aliado.
Lo recomendable es usar el delineador de labios por los bordes para crear una barrera física y también en todo el labio rellenando, de esta manera el labial tiene una base a la cual aferrarse. Luego se aplica el labial, cuando el lápiz se asiente.
El labial no dura
La duración promedio de los labiales es de 4/5 horas, pero si tu labial dura menos que eso o quieres hacerlo durar un poco más es muy recomendable usar un delineador de labios. El principio es el mismo, se le da al labial una base a la que aferrarse. Sirve para esos labiales sheer que son menos pigmentados y más cremoso o para labiales oscuros que necesitan verse intactos.
Si tienes los labios muy pequeños o muy grandes
En el caso de los labios muy finos se puede dar la ilusión de que son más grandes. Con un delineador no demasiado suave haz una línea que vaya apenas por fuera del límite natural de tu labios. ¡Solo un poco por fuera! Nunca hay que exagerar o no se verá natural. Y ojo, el lápiz debe ser del mismo color del labial, no queremos esos delineados noventeros.
Si son muy grandes y quieres que se vean un poco mas pequeños debes hacer lo contrario y dibujar una línea por dentro de tu borde natural, otra vez, ¡sin exagerar! Alrededor puedes aplicar corrector para que no se vea el labio que quedó fuera de la línea.
Esto suena sencillo, pero debes practicar mucho, en ambos casos, para que quede natural.
Usa un delineador de labios si quieres corregir asimetrías
Si tienes pequeñas asimetrías las puedes corregir con un delineador de labios. Ojo, pequeñas asimetrías. En este caso Clio nos dice que hay que usar productos opacos y de colores lo más naturales posible ya que la intervención debe ser casi invisible. Así se puede corregir la forma de los labios si tiene algún pequeño defecto.
Cuando no tienes un labial opaco
Hoy todas amamos los labiales mate, pero quizás no todas tenemos uno o el color que queremos. Si tienes diversos lápices de labios prueba a transformarlos en labiales extendiéndolos en modo homogéneo. El acabado de casi todos los delineadores de labios es opaco, por lo que conseguirás el efecto mate. Los de L.A Girl son ideales para esto y a precio accesible.
Eso sí, como con cualquier labial efecto mate hay que tener los labios hidratados y sin cueritos, porque se notan más y los lápices pueden resecarlos aún más.
Cuando quieres crear un efecto ombré en los labios
Si te gusta este efecto lo puedes conseguir con lápices de labios. La mayoría lo hace con pinceles, pero si no tienes la práctica puedes conseguirlo con delineadores.
Para este efecto se necesita dar la sensación de tridimensionalidad. Y en este caso el lápiz se usa después del labial y no antes. Además tiene que ser más oscuro para usarlo por los bordes. Se difumina hacia los labios para que no hayas líneas rectas.
Estas son entonces las seis situaciones que nos describe Clio y quise compartir con ustedes.
¿En qué otras ocasiones usas delineador de labios?
¡A compartir y comentar!
*Imágenes de Pinterest.
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Soy Fan de ellos, cada vez tengo mas, besitosssss