Bálsamos labiales: ¿cuáles tengo y cuáles me gustan?

Hoy quiero hablarles de mi producto favorito en el mundo mundial: los bálsamos labiales. Hace unas semanas una amiga me dijo que estuvo buscando una entrada sobre este tema en el sitio y que no encontró nada… ¿cómo puede ser que haya tardado 8 meses en hablar de los bálsamos labiales? Después de eso decidí que tenía que hacer sí o sí una entrada. Lo que terminó de convencerme fue un artículo de BuzzFeed que se llama “17 cosas que solo una persona adicta a los chapsticks puede entender” y creo que con todos los puntos me sentí identificada.

No es necesario que cuenten en cada foto cuántos bálsamos labiales hay, se los puedo decir yo: 45 en total. ¿Excesivo? Sí, absolutamente, y eso sin contar que hay algunos dando vueltas por mis carteras y el auto los cuales no fotografié. Yo recomiendo tener tres, uno en la cartera, uno en el velador y otro en el auto (si es que ocupas). Y ojalá comprar uno nuevo solo cuando se te acabe otro. Claramente yo no he sabido seguir esta regla, pero luego de ver la gran acumulación que tengo decidí que, al menos por un tiempo, no voy a comprar más. Hasta que me vaya de viaje, muajaja.

Mis bálsamos labiales

Los naturales.

Estos son los típicos bálsamos que encuentras en las ferias artesanales. Normalmente están hechos con productos naturales como manteca de karité o cera de abejas. En general me encantan este tipo de bálsamos, son suaves, hidratan y tienen olores ricos. Generalmente si voy a una feria saldré con uno nuevo. El que ves arriba a la derecha que dice “sabor mora” lo compré en una feria verde y me encanta. Los de potes más chiquitos son de Reina Abilene, que lamentablemente ya no vende más. No están mal, pero la verdad es que, si aún existiera la tienda, no compraría más. Los de abajo en los extremos no me han gustado mucho, son difíciles de aplicar, se endurecen demasiado en invierno. El del frasquito lo hice yo con manteca de karité, de cacao y cera de abejas.

Los extranjeros.

Estos son de afuera, los he traído de algún viaje o alguien me los ha traído luego de viajar. No había escuchado buenos comentarios de los de Coca Cola, pero la verdad me han sorprendido, son bien suaves y dejan una rica sensación. No me gustan mucho los olores, dejé de tomar bebidas gaseosas hace poco más de un año y volver a sentir esos sabores no me agrada, pero la textura es rica. Las latitas de la izquierda son de Londres, muy baratos (menos de mil pesos), pero la verdad es que son pura vaselina. Los que están completamente cerrados son Farmacity, los compré en Argentina hace poco y aún no pruebo ninguno, por lo que no puedo dar referencias.

Los de alta gama.

Los nombré de “alta gama” porque su precio es algo más elevado. De esta imagen los más baratos son los de Kiehl’s que tienen un valor de $6.990 (si no me equivoco) y el más caro el Dior, que está a unos $18.000, pero no puedo asegurarlo porque yo lo compré en un duty free. Y la verdad es que, si bien no son malos, no sé si vale la pena el precio. Todos los de tubitos son muy densos y molestan un poco en los labios, generalmente los uso más de noche. El de MAC lo he usado muy poquitas veces así que no podría hablarles en extenso de él. El de Dior deja una sensación exquisita y un color precioso, pero es tan caro que hasta me da pena usarlo demasiado.

Los medicados.

Estos son también de mis favoritos. Si bien son “aburridos” y no tienen olores especiales, como reparadores de labios son excelentes. Si me siguen desde You Tube sabrán que tengo la mala costumbre de pellizcarme los labios y por lo tanto los tengo muy dañados. Estos tres bálsamos han sido los mejores para solucionar eso. Y acá hago un poco de trampa, por que el de Blistex está vacío… lo encontré una vez en Jumbo y no he vuelto a pillarlo. Sin embargo, en alguna feria encontré el de Carmex y es bien parecido, la lata es que lo traen carísimo a Chile, a mí me costó 4 mil pesos, pero alguna vez lo vi a $6.000 y me pareció un aprovechamiento. Existe una crema Aquaphor especial para los labios, pero no sé si la venden en Chile. Yo uso la crema regular para piel extremadamente seca y me funciona perfecto.

Los accesibles.

Estos son fáciles de encontrar y a bajos precios. Si no me equivoco ninguno cuesta más de tres mil pesos, aunque un par fueron un regalo. En general están en supermercados y farmacias, los de Sheet! los encuentras por Providencia (ahora me entró la duda al revisar la página, pero si la tienda ya no está, volverá) y el de Essence era una colección, pero en DBS hay varios bálsamos. De estos mis favoritos son los de Nivea, en general todos son buenos preventivos, pero para reparar me quedo con los de la imagen anterior.

Mis favoritos.

De los que tengo mis favoritos son estos. Aunque insisto en que estoy haciendo trampa con el de Blistex porque no me queda. Todos tienen una buena textura, alivian la resequedad y en el caso de los medicados reparan las llagas. El que dice “labial natural” es de Apícola Lonquén, aunque se derrite muy fácilmente tiene una agradable sensación en los labios. Se supone que tenían una página, pero sale “cuenta suspendida” :/ El de Nivea lo encuentras en Líder, los aromas son muy ricos, la textura suavecita y los labios quedan muy bien.

A todos los de las foto quiero agregar algunos que no salieron. En realidad son dos, uno es un producto indicado para labios y el otro… ya lo verán.

En alguna cartera perdida debo tener el Acute Lip Balm de Eucerin, del que te hablé hace un tiempo acá. De haberlo tenido a mano lo habría incluido en los medicados, repara los labios cuando ya están dañados y también previene resequedades. No es demasiado barato, cuesta alrededor de seis mil pesos en farmacias, pero yo los pago si es por mejorar mis labios (en mi caso que están dañados). El otro producto es el Bepanthol, sí, esa crema para las coceduras de las guaguas. La misma crema que te recomiendan cuando te haces un tatuaje. Leí por ahí que servía para los labios y resequedades, lo probé una noche y fue una maravilla. Tiende a dejar blanco, por eso lo uso de noche, pero la verdad es que si me voy a la cama con él al otro día mis labios amanecen notablemente mejor. Si bien es barato, creo que no lo compraría si fuera para usarlo solo en los labios, porque es muy grande, pero también sirve para los codos y rodillas, así que yo que tú, lo tendría presente si para ti los labios resecos son un tema.

Ahora que estamos en plena Copa América un día partí al estadio y no llevé ningún bálsamo. Fue una de las peores cosas que me pudieron pasar. Bueno, obviamente hay cosas muchísimo peores, pero hablando de cuidado personal y belleza, eso fue lo peor. Los labios se me llenaron aún más de cueritos, se veían horribles, me dolían y lo solucioné con mucho Bepanthol. Alguna vez me dijeron que lo mejor era no usar bálsamos labiales, pero me da terror el síndrome de abstinencia porque por unas pocas horas, casi me muero. La verdad es que no quiero dejar los bálsamos labiales, me encantan y ¡quiero conocerlos todos!

¿Cuáles bálsamos labiales me recomiendas? ¡Comparte y comenta!